El martes 5 de septiembre han sido los mayores quienes han honrado a la Patrona participando en una eucaristía a la que ha seguido la merienda de fraternidad. Actos participados por centenares de personas que han contado con la presencia y participación de la Cofradía, festeros, junior Caminar y personas voluntarias.
Hemos dado gracias a Dios porque las personas mayores, con su vida y su palabra, son los voceros que transmiten la tradición de un pueblo a los hijos y a los nietos.

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